Hoy ponemos las palabras al servicio de la Luz, de esa luz interna que es nuestro Espíritu, al cual debemos escucharlo de forma activa, para poder expresar la luz que todos tenemos en nuestro interior.
La comunicación con nuestro espíritu nos alienta a tomar consciencia de cómo nos expresamos, de que tipo de luz estamos hechos y como consecuencia de cómo nos comunicamos. Comunicarse no sólo es hablar o expresar, sino también escuchar, aixx… y qué difícil es a veces escuchar de manera activa. La energía del día de hoy nos invita a cambiar nuestra forma de comunicarnos, para poder escucharnos y escuchar a los demás, dándoles el espacio necesario para que se expresen, sin interrumpir, y sobre todo no escuchando para contestar, porque entonces es que no estamos escuchando desde el espíritu, sino desde el Ego.
Rompamos los viejos hábitos de comunicación, aprendamos de nuestra sabiduría interna, tomemos decisiones desde el espíritu… para eso tenemos que escucharnos desde el interior, dejemos que el viento de nuestro espíritu aliente el rumbo hacia la sincronicidad de la expresión natural. Hay momentos que nos toca hablar y otros que nos toca escuchar. Prestarle atención a alguien cuando habla desde el corazón, es un abrazo invisible de nuestro espíritu con el suyo, es cuando la comunicación se vuelve sagrada y se crea un espacio de libertad para la verdadera expresión.
Transformar nuestra manera de expresarnos nos abre la luz del corazón, permitiendo cambiar pautas automáticas por procesos de más conciencia, escuchar a alguien desde el corazón se está convirtiendo en algo difícil de ver en los valores de la sociedad actual. Cambiar esa pauta interna sólo depende de nuestro compromiso de ponernos al servicio de la Luz y la conciencia, así que prueba de escuchar desde la conciencia de aquellos que hoy te hablen y necesiten ser escuchados. Porque en este mundo si quieres que te escuchen primero debes aprender a escuchar y sobre todo escuchar desde la humildad del corazón.
Las palabras contienen una energía poderosa y cómo utilizarlas es una decisión interna de nuestro libre albedrío, por eso haz consciente hoy cómo te hablas y cómo hablas a los demás…
La verdadera comunicación es escuchar desde la conciencia del corazón, yo soy otro tú
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